viernes, 30 de julio de 2010

Tres historias de vida desde El Socorro y San Gil...

Durante tres días el Hermano Carlos y yo hemos estado trabajando en el Colegio Tecnológico ITIS de El Socorro, a poco más de dos horas de Bucaramanga,. El Socorro es, precisamente, el lugar donde ahora hace exactamente 200 años se empezó a fraguar la lucha de la independencia del pueblo colombiano contra España. Para mí El Socorro ha sido el empezar a encontrar aquello que vine a buscar (siempre se busca o se huye de algo) a Colombia: historias humanas con las que compartir mi vida. No os aburriré con nada más de todo lo que hemos hecho, y ha sido mucho, pero sí me gustaría que prestaseis atención a estas tres historias. A mi se me han clavado en lo más profundo... 

El chico que se encuentra a mi lado en esta foto se llama José "Pae" Duarte. Tiene dos hermanos, uno gemelo, y una hermana. El mayor intentó matarlo a cuchillazos hace tres días y el se defendió clavándole otro cuchillo en el brazo. Su abuela, la única adulta con la que viven, ya no sabe qué hacer y está verdaderamente desesperada: Nos lo encomendó a Carlos y a mí para que le hiciésemos entrar en razón... Y ha sido un gran momento: el explicándonos como le aburre la escuela pero como quiere ser profesor de mayor, como le gustaría también ser futbolista y, de manera especial, como se han iluminado sus ojos ante mi promesa de regalarle una camiseta OFICIAL del Barcelona si, de pronto (como dicen por aquí), va recuperando en los estudios y su abuela puede estar orgullosa de él... El tiempo y el facebook (ahora estamos en contacto) dirán...


Con algunos alumnos del colegio de "El Socorro"
La segunda historia no tiene foto (ni me atreví...) pero habla de Mayra, una niña de unos once años que vende numeritos de un sorteo para un mercado (un lote de productos alimentarios). Mayra vive con su madre, su padrastro y cinco hermanos más. Nos comenta que la tratan muy bien... pero que no hay plata para el transporte hacia la escuela y que el sorteo (un simple papel en el que apunta en el lugar de cada número quién se lo "compra" para poder darle luego el premio) es para poder pagar ese transporte porque si no no puede ir al colegio y ella es buena estudiante, no ha perdido nunca curso y quiere estudiar... Le compro dos números (a mil pesos el número) y me quedo con la sensación de no haber hecho nada. Luego la busco decidido a comprarle todos los números que le quedan (más para callar mi consciencia que por otra cosa, seguro...) pero ella ya se ha perdido por las calles de San Gil...


Carlos en plena charla...
La tercera y última historia tiene por sujeto a William, padre de familia responsable y muy preocupado por sus dos hijos adolescentes, especialmente por su hija de dieciséis años... Nos conoció a la salida de una Celebración de la Palabra en san Gil y al saber quiénes éramos nos invitó a comer (cenar) para que le asesorásemos. Su gran preocupación es que su hija no caiga en la prostitución infantil (extendida por aquí) o que se quede embarazada de un novio mayor que tiene ahora... Fue una cena llena de emociones, consejos, ideas y vida... mucha vida entre desconocidos pero compartida desde el amor más sincero. Ojalá les sirva de algo...


Y pasó una tercera barca que le dijo...

7 comentarios:

  1. Llevaba dias esperando noticias, para ver como os había ido. Si a mi (estando a un porrón de km de distancia) me ha costado reaccionar después de leerlo, no me quiero imaginar como fueron los distintos encuentros.
    ¿Teneis alguna novedad de Piccoli?

    Una brazo Lluís y muchos recuedos a todos,

    Javi

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  2. Y este hombre, ya anciano, salió de Haran, su casa, por seguir una intuición de su corazón, y sin que Dios le revelase sus planes. Dio un sí, al que luego no siempre fue fiel. Dios le prometió una bendición, “alza la vista y mira al cielo… cuenta si puedes las estrellas. Así de grande será tu descendencia”. Pero Abram no siempre creyó. Prefirió ir a buscarse un hijo con su sirvienta o hacer pasar a su mujer por su hermana. Pero aun así, Dios nunca lo abandonó, y le dio siempre una nueva oportunidad. Así, Abram fue comprendiendo que la bendición de Dios llega cuando el hombre está preparado para ella. Hasta que un día, bajadas todas las barreras, caídas todas las defensas, uno es capaz de decir “hágase en mí” y confiar… entonces, Dios obra el milagro ansiadamente esperado.
    Esperad siempre en el Señor.

    Te dejo una de las lecturas que más me gustan. Él no hace milagros para vagos, jeje.

    P.D. "My name is Lucca" de Suzanne Vega (voy a ganar el concurso!)

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  3. Buenas Javi. De Piccolli te puedo explicar que Manos Unidas denegó la ayuda que solicitábamos y ello conlleva que perdamos también los 200 millones de pesos del FUPAD, la organización colombiana dependiente de Naciones Unidas que nos colaboraba. Sólo nos queda la paciencia y la esperanza de que se abran nuevas vías de financiación...

    Anónima. Gracias por el texto, muy adecuado a pesar de que Abraham y su seguro servidor distan una eternidad... Por otro lado ese concurso no lo gana su merced si no es pasando por encima de mi musical cadaver... En mensaje adjunto añado mi nueva aportación considerando que ya ha llegado el momento de establecer el premio al vencedOr (óbsérvese la O) de tan preciado evento.

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  4. Victor desde Madrid31 de julio de 2010, 10:18

    Este tipo de historias te hacen en que pensar... Te hacen ver que hay personas que estan mucho peor que tu y que necesitan apoyo...os admiro por lo que estais haciendo alli espero algun dia ir alli a colaborar como vosotros...gracias por compartirlas con los lectores del blog!!! Moltes gracies

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  5. Lluís!! Bueno me he quedado super pillada con las historias y personalmente que creo que el trabajo que hacéis es increible, ojalá lo pueda hacer yo algun día, de verdad para mi soys un gran ejemplo. Bueno muchos besitos para que no te sientas solo en ningún momento! un saludoo y disfrutaa muchoo!!!

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  6. Bueno bueno... leerlo parece mucho más facil que vivirlo, pero aún así simplemente con leerlo a mi personalmente ya se me pone la piel de gallina.
    Al leer esto me doy cuenta de la gente que sacrifica sus vacaciones para poder ayudar y escuchar a las personas que más lo necesitan Sois personas que vale la pena seguir en el camino!
    Solo hacerte una recomendación: pienso que a José "pae" le sentaría mucho mejor una camiseta blanca de futbol ;)

    Bueno... se que escribiendo esto no voy a lograr gran cosa, pero supongo que alguna sonrisilla te sacaré, nooooo!?!?!? :)
    Muchos ánimos y un besotee enorme

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  7. Tres historias de vida... pero también de esperanza. Tres personas que seguramente pudieron dormir esa noche un poco mejor... Tres sonrisas. Tres milagros.

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